La disolución ocurre cuando las moléculas de azúcar están rodeadas por moléculas de agua y las moléculas de agua rompen los enlaces entre las moléculas de azúcar. Esto hace que las moléculas de azúcar se extiendan y se distribuyan uniformemente por todo el agua. La mezcla resultante se llama solución.
La cristalización ocurre cuando las moléculas de agua se evaporan de una solución, dejando atrás las moléculas de azúcar. Luego, las moléculas de azúcar se vuelven a juntar y forman cristales. El tamaño y la forma de los cristales dependen de la velocidad de evaporación y de la concentración de la solución.
La reversibilidad de la disolución del azúcar en agua es un concepto importante en química. Muestra que algunas reacciones químicas se pueden revertir y que los productos de una reacción se pueden volver a convertir en los reactivos originales.