Los ácidos grasos específicos unidos a la molécula de glicerol pueden variar y esta variación da lugar a diferentes tipos de grasas y aceites. Por ejemplo, en la mayoría de los aceites vegetales, los ácidos grasos unidos al glicerol son insaturados, como los ácidos oleico, linoleico y linolénico. Por el contrario, las grasas animales suelen contener una mayor proporción de ácidos grasos saturados, como los ácidos palmítico y esteárico.
El tipo y proporción de ácidos grasos unidos a la molécula de glicerol influyen en las propiedades físicas y químicas de la grasa o aceite, como su punto de fusión, textura y valor nutricional.