Para vigas y columnas hechas de aluminio, los límites de deflexión a menudo se especifican como una fracción de la longitud del claro o de la longitud del miembro. Por ejemplo, en el Eurocódigo EN 1999-1-1, la deflexión permitida para cargas distribuidas uniformemente se limita típicamente a L/250 para vigas de aluminio y L/350 para columnas de aluminio, donde L es la longitud efectiva del claro.
En el caso de placas como, por ejemplo, paneles de revestimiento de aluminio o placas de suelo, los límites de deflexión suelen definirse en términos del espesor de la placa o de la longitud del vano. Por ejemplo, en la norma británica BS EN 1999-1-3, la deflexión permitida para cargas distribuidas uniformemente sobre placas de aluminio está limitada a 0,005 x L, donde L es la longitud del tramo.
Estos límites de deflexión se establecen para evitar la flexión y deformación excesivas de los elementos estructurales de aluminio, garantizando una rigidez, capacidad de servicio y seguridad general adecuadas de la estructura. Es importante seguir estos límites durante el proceso de diseño y construcción para mantener la integridad y el rendimiento de las estructuras de aluminio.