Sí, lo es. Este proceso implica romper los enlaces entre los átomos de hidrógeno y oxígeno en las moléculas de agua (H2O) para producir moléculas separadas de hidrógeno (H2) y oxígeno (O2). Este cambio en la composición química es el sello distintivo de un cambio químico, ya que se forman nuevas sustancias con diferentes propiedades a partir del material de partida original.