El paladio es un metal del grupo del platino que tiene una apariencia similar al oro. Es más duro que el oro y tiene un punto de fusión más alto. El paladio también es menos reactivo que el oro, lo que significa que es más resistente a la corrosión.
La adición de paladio al oro puede mejorar la resistencia, dureza, durabilidad y resistencia a la corrosión del metal. Esto hace que las aleaciones de paladio y oro sean ideales para su uso en joyería, monedas y otras aplicaciones donde se requiere un metal resistente y duradero.
La proporción de oro y paladio en una aleación puede variar según las propiedades deseadas. Por ejemplo, una mayor proporción de paladio dará como resultado una aleación más dura y duradera, mientras que una mayor proporción de oro dará como resultado una aleación más blanda y maleable.
Las aleaciones de paladio y oro se utilizan a menudo en joyería porque son fuertes, duraderas y tienen una apariencia hermosa. También son hipoalergénicos, lo que significa que es menos probable que provoquen reacciones alérgicas.