Los contaminantes detectados con mayor frecuencia fueron los productos farmacéuticos, incluidos antibióticos, antiinflamatorios y antidepresivos. En muchas de las muestras también se encontraron productos de cuidado personal, como champú, acondicionador y pasta de dientes. En algunas de las muestras también se detectaron productos químicos industriales, como disolventes, desengrasantes y pesticidas.
Los niveles de contaminantes detectados en las aguas residuales tratadas variaron ampliamente, dependiendo del tipo de planta de tratamiento y la fuente de las aguas residuales. Sin embargo, incluso los niveles más bajos de contaminantes podrían tener efectos adversos en la salud humana y el medio ambiente.
Por ejemplo, se ha demostrado que los productos farmacéuticos alteran el sistema endocrino, lo que puede provocar una variedad de problemas de salud, incluidos problemas reproductivos, trastornos del desarrollo y cáncer. Se ha demostrado que los productos de cuidado personal contribuyen a la formación de bacterias resistentes a los antibióticos. Y se ha demostrado que los productos químicos industriales causan una variedad de problemas de salud, incluidos cáncer, defectos de nacimiento y trastornos neurológicos.
Los hallazgos del estudio plantean preocupaciones sobre la seguridad de las aguas residuales tratadas en Victoria. Aunque las aguas residuales se tratan para eliminar la mayoría de los contaminantes, todavía quedan algunos contaminantes. Estos contaminantes podrían suponer potencialmente un riesgo para la salud humana y el medio ambiente.
Se necesita más investigación para determinar el alcance total de los riesgos que plantean las aguas residuales tratadas en Victoria. Mientras tanto, es importante tomar medidas para reducir los niveles de contaminantes en las aguas residuales. Esto se puede lograr reduciendo el uso de productos farmacéuticos y de cuidado personal y mejorando el tratamiento de las aguas residuales.