Existen varios tipos diferentes de tecnologías CAC, pero el enfoque más común es capturar CO2 de fuentes industriales, como plantas de energía, y luego inyectarlo en formaciones geológicas profundas. El CO2 también se puede capturar directamente del aire, pero es más caro y menos eficiente.
La CCS es una tecnología relativamente nueva y todavía quedan algunos desafíos que superar antes de que pueda implementarse ampliamente. Un desafío es que la CCS es costosa. Otro desafío es que existen preocupaciones sobre la seguridad del almacenamiento de CO2 bajo tierra.
A pesar de estos desafíos, la CAC se considera una tecnología importante para mitigar el cambio climático. Si la CAC se puede desarrollar e implementar con éxito, podría ayudar a reducir las emisiones globales de CO2 en miles de millones de toneladas por año.
Estos son algunos de los beneficios de CCS:
* La CAC puede ayudar a reducir la cantidad de CO2 en la atmósfera. El CO2 es un gas de efecto invernadero, lo que significa que atrapa calor en la atmósfera y contribuye al cambio climático. Al capturar y almacenar CO2, la CCS puede ayudar a reducir la cantidad de calor atrapado en la atmósfera y frenar el ritmo del cambio climático.
* La CAC puede ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Los combustibles fósiles, como el carbón, el petróleo y el gas natural, son las principales fuentes de emisiones de CO2. Al capturar y almacenar CO2 de las centrales eléctricas que utilizan combustibles fósiles, la CCS puede ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y a la transición hacia una economía de energía limpia.
* La CCS puede crear empleos. El desarrollo y la implementación de tecnologías CAC podrían crear millones de puestos de trabajo en todo el mundo. Estos trabajos incluirían ingenieros, trabajadores de la construcción y científicos.
Estos son algunos de los desafíos de CCS:
* La CCS es cara. El coste de capturar y almacenar CO2 sigue siendo relativamente elevado. Esto se debe al hecho de que las tecnologías CAC aún están en desarrollo y faltan economías de escala.
* La CCS requiere mucha energía. El proceso de captura y almacenamiento de CO2 requiere mucha energía. Esta energía puede provenir de fuentes renovables, como la solar y la eólica, pero también puede provenir de combustibles fósiles.
* Existe preocupación sobre la seguridad del almacenamiento de CO2 bajo tierra. El CO2 es un gas denso y existe la preocupación de que pueda escaparse de los sitios de almacenamiento subterráneos a la atmósfera. Esto podría suponer un riesgo para la salud humana y el medio ambiente.
En general, la CAC es una tecnología prometedora para mitigar el cambio climático, pero aún quedan algunos desafíos que superar antes de que pueda implementarse ampliamente.