1. Acidificación de los océanos :Los niveles crecientes de CO2 atmosférico se disuelven en el agua del océano, lo que provoca su acidificación. Este proceso reduce el pH del agua de mar y tiene impactos negativos en los ecosistemas marinos, incluido el blanqueamiento de los corales y la reducción de las tasas de crecimiento de los organismos marinos.
2. Precipitación de carbonato de calcio :Cuando se agrega cal (óxido de calcio) al agua de mar, reacciona con el agua para formar hidróxido de calcio, que es altamente alcalino. Esto aumenta el pH del agua de mar.
3. Captura de carbono :El aumento del pH en el agua de mar provoca una reacción química que conduce a la precipitación de carbonato de calcio (CaCO3) a partir de iones de bicarbonato (HCO3-) disueltos en el agua de mar. Este proceso es similar a la formación de conchas marinas y arrecifes de coral.
4. Secuestro de carbono :A medida que el carbonato de calcio precipita del agua, captura y retiene el dióxido de carbono (CO2) disuelto en una forma sólida, eliminándolo efectivamente de la atmósfera. Este proceso se conoce como secuestro de carbono.
5. Acidez reducida :Al aumentar la alcalinidad del agua de mar, la adición de cal puede ayudar a neutralizar parte del exceso de acidez causado por el CO2 disuelto, reduciendo así la acidez del océano.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que agregar cal al océano es una idea controvertida y todavía se necesita un debate considerable y una investigación científica antes de que pueda implementarse ampliamente como método de captura de carbono. Podría haber posibles consecuencias no deseadas y riesgos ambientales asociados con la adición de cal a gran escala, como impactos en la vida marina, alteración de los ecosistemas marinos y alteración de la química del océano.
Por lo tanto, es necesario evaluar cuidadosamente los posibles beneficios, riesgos e impactos ecológicos antes de considerar la adición de cal como un enfoque a gran escala para la reducción del CO2 atmosférico.