Más de uno de cada 10 bebés en todo el mundo nace prematuramente, según la Organización Mundial de la Salud. Ahora los científicos informan en Ciencia e ingeniería de biomateriales ACS que han desarrollado un órgano en un chip que podría ayudar a explicar por qué. El dispositivo, que replica las funciones de una membrana clave en la placenta, podría conducir a una mejor comprensión de cómo las infecciones bacterianas pueden promover el parto prematuro. También podría dar lugar a nuevos tratamientos para esta afección.
Infecciones bacterianas, un desencadenante común de nacimientos prematuros, puede causar inflamación de la placenta o de la barrera placentaria, una membrana que regula el flujo de nutrientes y otras sustancias entre la madre y el niño. Como resultado, el saco amniótico puede romperse, produciendo trabajo de parto de inicio temprano. Estudiar este problema ha resultado complicado, en parte porque no es factible realizar ensayos clínicos que incluyan mujeres embarazadas, y las placentas humanas donadas después del nacimiento solo pueden sobrevivir unas pocas horas. Sin embargo, Los investigadores crearon recientemente un chip de placenta, un nuevo y prometedor dispositivo de microfluidos que permite que las células placentarias crezcan y funcionen como si todavía estuvieran en el cuerpo. Profundizando más Jianhua Qin y sus colegas buscaron crear un dispositivo similar que replicara específicamente las funciones de la barrera placentaria y cómo responde a la infección bacteriana.
Los investigadores implantaron trofoblastos humanos (que representan las células de la madre) y células endoteliales (que representan al feto) de una vena del cordón umbilical humano en lados opuestos de un dispositivo de microfluidos de tres capas. Una membrana porosa entre las dos capas de células permitió que los tejidos formaran una barrera placentaria entre ellos. Después de determinar que la barrera estaba funcionando como lo haría en el cuerpo, los investigadores agregaron la bacteria E. coli a la capa materna. Las bacterias proliferaron rápidamente, rompió la barrera placentaria, y posteriormente desencadenó inflamación y muerte celular en las dos capas maternal y fetal contiguas. Los investigadores concluyeron que las barreras placentarias en un chip podrían ayudar a explicar las respuestas inflamatorias en la placenta humana y posiblemente conducir a mejores formas de tratar o prevenir el parto prematuro causado por infecciones.