* El tipo de cáncer: Los diferentes cánceres tienen diferentes orígenes celulares, lo que significa que se ven diferentes entre sí.
* La etapa del cáncer: La aparición de una célula cancerosa puede cambiar a medida que avanza el cáncer.
* La composición genética del individuo: Incluso dentro del mismo tipo de cáncer, las células pueden verse ligeramente diferentes entre los individuos.
Sin embargo, algunas características comunes de las células cancerosas que las distinguen de las células normales incluyen:
* forma y tamaño anormales: Pueden ser más grandes o más pequeños que las células normales, tienen una forma irregular o tienen un número inusual de núcleos (la parte de la célula que contiene el material genético).
* Mayor tasa de división: Las células cancerosas se dividen más rápidamente que las células normales, lo que lleva a un crecimiento no controlado.
* Falta de diferenciación: Las células normales tienen una función y estructura específicas, pero las células cancerosas a menudo pierden esta especialización y se vuelven menos organizadas.
* Capacidad para invadir y extender: Las células cancerosas pueden liberarse del tumor original y propagarse a otras partes del cuerpo (metástasis).
Visualización:
* Microscopio: Bajo un microscopio, las células cancerosas a menudo parecen diferentes de las células normales, pero las diferencias específicas dependen del tipo de cáncer.
* Técnicas de imagen: Las técnicas de imágenes médicas como la resonancia magnética o las exploraciones PET pueden ayudar a identificar tumores y rastrear la propagación del cáncer, pero no muestran células individuales.
Nota importante:
Es crucial comprender que la descripción anterior es una descripción general. Un patólogo calificado siempre realiza un diagnóstico definitivo de cáncer basado en una biopsia y un examen cuidadoso bajo un microscopio.