1. dióxido de carbono (CO2): Esto se absorbe del aire a través de pequeños poros llamados estomas en las hojas. El dióxido de carbono proporciona los átomos de carbono necesarios para construir los azúcares que alimentan la planta.
2. agua (H2O): Esto se absorbe del suelo a través de las raíces. El agua proporciona los átomos de hidrógeno necesarios para los azúcares y también juega un papel en el transporte de nutrientes y facilitan las reacciones químicas dentro de la planta.