* Producción de energía: Las células musculares requieren una gran cantidad de energía (ATP) para contraerse y realizar su función. Las mitocondrias son las potencias de la célula, responsables de la respiración celular, que produce ATP.
* Demanda de alta energía: Las células musculares funcionan constantemente, ya sea para el movimiento, mantener la postura o incluso la respiración. Esta alta demanda de energía requiere una gran cantidad de mitocondrias para satisfacer las necesidades de la célula.
Mientras que otros orgánulos como el retículo endoplásmico y el aparato de Golgi también son importantes para la función muscular, la alta densidad de las mitocondrias es una característica definitoria de estas células.