1. Respiración: El proceso de respirar en oxígeno y expulsar el dióxido de carbono. Esto es vital para la producción de energía celular.
2. Circulación: El movimiento de la sangre en todo el cuerpo, entregando oxígeno y nutrientes, y eliminando productos de desecho. Esto se basa en el corazón y los vasos sanguíneos.
3. Digestión: La descomposición de los alimentos en moléculas más pequeñas que el cuerpo puede absorber y usar para la energía y los bloques de construcción. Esto involucra el estómago, los intestinos y varias enzimas digestivas.
4. Excreción: La eliminación de productos de desecho del cuerpo. Esto incluye micción, defecación y sudoración.
5. Movimiento: La capacidad de mover el cuerpo y sus partes. Esto es necesario para la locomoción, mantener la postura y llevar a cabo tareas cotidianas.
6. Regulación: Mantener un entorno interno estable (homeostasis). Esto incluye regular la temperatura, la presión arterial, el equilibrio de líquidos y los niveles de azúcar en la sangre.
Es importante tener en cuenta que estas funciones están interconectadas y dependen de sistemas complejos dentro del cuerpo. Las interrupciones en una función pueden tener efectos en cascada en los demás, lo que puede afectar la salud y la supervivencia general.