1. Glándulas salivales: Producir saliva, que humedece los alimentos, comienza la descomposición de los carbohidratos con enzimas y ayuda a tragar.
2. hígado: Produce bilis, lo que ayuda a la digestión y la absorción de grasas. También filtra sangre, almacena glucógeno y juega un papel en el metabolismo.
3. Berralización: Tiendas y concentrados bilis producidos por el hígado, liberándolo al intestino delgado cuando sea necesario.
4. pancreas: Produce enzimas digestivas que descomponen carbohidratos, proteínas y grasas en el intestino delgado. También secreta insulina y glucagón, que regulan los niveles de azúcar en la sangre.
5. Dientes: Estos no son técnicamente órganos, pero juegan un papel crucial en la digestión mecánica, descomponiendo los alimentos en partículas más pequeñas para una deglución más fácil y una mayor digestión.
Por lo tanto, aunque no es estrictamente "accesorio" del tracto digestivo, estos cinco órganos son vitales para su funcionamiento adecuado.