La parte de la planta de jengibre que utilizamos es el rizoma, que es un tallo modificado que crece bajo tierra. Los rizomas de jengibre suelen medir entre 2 y 4 pulgadas de largo y tienen una forma nudosa e irregular. Están cubiertos por una piel fina y marrón y tienen un sabor picante y picante. Los rizomas de jengibre se utilizan frescos o secos en una variedad de aplicaciones culinarias y medicinales.