El estudio, publicado en la revista Nature Food, modeló cuánta tierra, agua y gases de efecto invernadero se ahorrarían si el estadounidense promedio cambiara la carne de res por espirulina, un alga verde azul brillante que se puede cultivar al aire libre en agua de mar.
Los investigadores descubrieron que si sólo una cuarta parte de la población estadounidense (alrededor de 85 millones de personas) hiciera este cambio dietético, se podrían liberar 1,5 millones de hectáreas (5.800 millas cuadradas) de tierra, reducir el consumo de agua dulce en 1,2 billones de galones por año y ahorrar casi 18 millones de toneladas de CO₂ equivalente al año.
"Reemplazar la proteína de origen bovino con proteína de microalgas es una de las acciones más poderosas que los individuos pueden tomar para reducir su huella ambiental", afirmó el autor principal, el Dr. Christopher Foreman, investigador de la Oxford Martin School de la Universidad de Oxford.
"Cambiar sólo entre el 15% y el 25% de nuestro consumo medio de proteínas de origen animal a microalgas podría transformar nuestro sistema alimentario".
La carne de res es uno de los alimentos que más recursos consume en el planeta. El ganado requiere grandes cantidades de tierra y agua para criar y producir cantidades significativas de gases de efecto invernadero, incluidos metano, óxido nitroso y dióxido de carbono.
La producción ganadera es un factor importante en la deforestación y la degradación ambiental y un contribuyente significativo al cambio climático.
Reemplazar la carne de res con espirulina podría reducir significativamente el impacto ambiental de nuestro sistema alimentario y ayudar a mitigar las graves consecuencias del cambio climático.
En el estudio, los investigadores modelaron tres escenarios:
- Escenario 1:el 25% del consumo promedio de carne vacuna en Estados Unidos se reemplaza con espirulina.
- Escenario 2:el 50% del consumo promedio de carne vacuna en Estados Unidos se reemplaza con espirulina.
- Escenario 3:el 100% del consumo promedio de carne vacuna en Estados Unidos se reemplaza con espirulina.
Los investigadores encontraron que incluso en el escenario más modesto (Escenario 1), reemplazar solo el 25% del consumo promedio de carne de vacuno en Estados Unidos con espirulina podría ahorrar tierra, agua y emisiones equivalentes a:
- Sacar de circulación todos los coches de la ciudad de Nueva York durante un año entero.
- Eliminar todas las centrales eléctricas de Texas durante un año entero.
- Proteger una superficie de bosque del tamaño de Delaware.
"Los ahorros medioambientales que supone sustituir la carne vacuna por espirulina son sencillamente enormes", afirmó Foreman.
Y no sólo es bueno para el planeta; La espirulina también es buena para la salud.
Es un alimento rico en nutrientes, rico en proteínas, hierro, vitamina B12 y otros nutrientes esenciales. También es un poderoso antioxidante y se ha relacionado con varios beneficios para la salud, incluida la reducción de la inflamación, la mejora de la función inmune y la reducción del colesterol.
Entonces, si está buscando una manera de comer saludablemente y salvar el planeta, considere cambiar parte de esa carne por algas espirulina. Es una opción deliciosa, nutritiva y sostenible que puede marcar una diferencia real.