Dirigido y eficiente: Las técnicas de edición del genoma utilizan herramientas moleculares como CRISPR-Cas9 para alterar directamente genes específicos o regiones genómicas responsables de rasgos deseables. Elimina la necesidad de cruces extensivos y cría selectiva, lo que reduce significativamente el cronograma y la inversión de recursos.
Precisión: Mediante el uso de la edición del genoma, se pueden modificar con precisión genes específicos o elementos reguladores, lo que lleva a cambios predecibles y controlados en los rasgos de las plantas.
Diversidad genética más amplia: La edición del genoma proporciona acceso a un conjunto más amplio de variaciones genéticas y permite la incorporación de rasgos deseables de especies o variedades lejanamente relacionadas. Supera las limitaciones de la reproducción tradicional basada en la compatibilidad sexual y la variación genética natural dentro de una especie.
Resistencia a enfermedades: La introducción de genes de resistencia a enfermedades mediante la edición del genoma puede mejorar la protección de los cultivos contra plagas, patógenos y enfermedades, reduciendo potencialmente la necesidad de pesticidas químicos y mejorando el rendimiento y la calidad de los cultivos.
Mejora nutricional: La modificación de genes implicados en el metabolismo o las vías de los nutrientes puede aumentar el valor nutricional de los cultivos, como mejorar el contenido de vitaminas o reducir los factores antinutricionales.
Resiliencia climática: La edición del genoma contribuye al desarrollo de cultivos mejor adaptados a las condiciones climáticas cambiantes, como la tolerancia a la sequía, la resiliencia a la temperatura y la tolerancia a la salinidad.
Rasgos agronómicos mejorados: La edición del genoma facilita mejoras en diversos rasgos agronómicos, incluido el aumento del rendimiento, la mejora de la calidad de las semillas y la optimización del tiempo de floración.
Velocidad y escalabilidad: La naturaleza específica de las técnicas de edición del genoma acelera el proceso de mejoramiento al introducir rasgos deseables directamente sin múltiples rondas de mejoramiento. Una vez que se logran las modificaciones genéticas deseadas, éstas se pueden ampliar de manera eficiente para producir variedades de cultivos mejoradas.
Complemento del mejoramiento genético tradicional: La edición del genoma apoya y complementa el mejoramiento convencional, permitiendo la rápida introgresión de rasgos específicos al tiempo que preserva las características deseables de las variedades existentes. Permite a los criadores centrarse en combinar los mejores rasgos de diferentes fuentes sin las limitaciones de la compatibilidad sexual.
En resumen, la edición del genoma ofrece una herramienta precisa y poderosa para mejorar los cultivos, permitiendo el desarrollo de mejores cultivos con rasgos personalizados, abordando los desafíos de la seguridad alimentaria y mejorando la sostenibilidad en la agricultura.