CIPK23 es una proteína quinasa de serina/treonina que participa en la regulación del crecimiento y desarrollo de las plantas. Es particularmente importante para controlar la división y el alargamiento celular, que son esenciales para el crecimiento de las plantas. La actividad de CIPK23 está estrechamente regulada por los niveles de calcio y su interacción con CaM.
Cuando los niveles de calcio aumentan en las células vegetales, CaM se une a CIPK23, provocando un cambio conformacional que activa la quinasa. La CIPK23 activada luego fosforila varias proteínas diana posteriores, iniciando una cascada de señalización que finalmente conduce a cambios en la expresión genética y las respuestas fisiológicas.
Uno de los objetivos clave de CIPK23 es una hormona vegetal llamada brasinoesteroide (BR). Los BR son esenciales para el crecimiento y desarrollo de las plantas y desempeñan un papel vital en la regulación del alargamiento celular. CIPK23 fosforila una proteína específica llamada quinasa 1 asociada a BRI1 (BAK1), que es un componente de la vía de señalización BR.
Al fosforilar BAK1, CIPK23 mejora la señalización de BR, lo que aumenta el alargamiento celular y el crecimiento de las plantas. Esto demuestra cómo CIPK23 actúa como un puente molecular entre la señalización del calcio y la acción de las hormonas vegetales, permitiendo a las plantas integrar estas señales para regular el crecimiento y el desarrollo.
Además, se ha descubierto que CIPK23 interactúa con otras proteínas y componentes de señalización dependientes de calcio, lo que sugiere su participación en procesos celulares adicionales más allá de la señalización BR. Comprender los intrincados mecanismos de regulación de CIPK23 y sus interacciones con CaM y otras proteínas proporciona información valiosa sobre cómo las plantas perciben y responden a las señales de calcio para controlar el crecimiento y el desarrollo.