Los murciélagos vampiros son únicos entre los mamíferos porque se alimentan exclusivamente de sangre, una dieta que ha influido significativamente en su biología y comportamiento. Para adaptarse a este requerimiento dietético inusual, los murciélagos vampiros han desarrollado rasgos especializados, que incluyen dientes afilados, saliva anticoagulante y la capacidad de localizar vasos sanguíneos mediante ecolocalización.
El estudio, dirigido por investigadores de la Universidad de Copenhague, se centró en los fundamentos genéticos de estas adaptaciones. Al comparar los genomas de los murciélagos vampiros con los de los murciélagos frugívoros estrechamente relacionados, los científicos identificaron varios cambios genéticos clave que probablemente desempeñaron un papel en la evolución de la alimentación sanguínea.
Un hallazgo significativo fue la identificación de una mutación en un gen implicado en la coagulación sanguínea. Esta mutación resultó en una disminución de la producción de una proteína que inhibe la coagulación sanguínea, lo que permite a los murciélagos vampiros alimentarse de sangre sin formar coágulos dañinos.
Además, los investigadores encontraron cambios en los genes relacionados con la percepción del gusto. Los murciélagos vampiros tienen una mayor sensibilidad a ciertos compuestos que se encuentran en la sangre, como el hierro y la hemoglobina, lo que les permite localizar los vasos sanguíneos y alimentarse de manera eficiente.
El estudio también destacó el papel de la selección natural en la configuración de la evolución de los murciélagos vampiros. Al analizar la diversidad genética de las poblaciones de murciélagos vampiros, los investigadores encontraron evidencia de fuertes presiones selectivas que actúan sobre los genes implicados en las adaptaciones a la alimentación sanguínea. Esto sugiere que la capacidad de alimentarse de sangre proporcionó una importante ventaja de supervivencia a los murciélagos vampiros, permitiéndoles prosperar en su entorno.
Los hallazgos de este estudio proporcionan información valiosa sobre la historia evolutiva de los murciélagos vampiros y subrayan el poder de la genética para impulsar adaptaciones a nichos ecológicos específicos. Comprender la base genética de estos rasgos podría tener implicaciones para estudiar otras adaptaciones y potencialmente ofrecer información sobre la evolución de diversas estrategias de alimentación en otros organismos.