Las biopelículas son comunidades de bacterias que viven muy cerca unas de otras y están rodeadas por una capa protectora de material extracelular de producción propia. Este material, compuesto de ADN, proteínas y polisacáridos, protege a las bacterias del estrés ambiental y de los antibióticos, lo que las hace difíciles de tratar.
En un estudio publicado en la revista Nature Communications , los investigadores de Berkeley utilizaron microscopía de fuerza atómica (AFM) para visualizar y medir las propiedades mecánicas de las biopelículas producidas por *Pseudomonas aeruginosa*, una bacteria que causa infecciones en los pulmones y el tracto urinario. Descubrieron que el material de la biopelícula tenía una arquitectura altamente estructurada compuesta de fibras a nanoescala densamente empaquetadas. Este denso embalaje contribuyó a la rigidez y resistencia de la biopelícula a las fuerzas mecánicas.
Los investigadores también identificaron dos proteínas involucradas en el ensamblaje y mantenimiento del biofilm. Una proteína, llamada PslG, fue necesaria para la formación de fibras a nanoescala, mientras que la otra proteína, llamada Pel, fue necesaria para el empaquetamiento denso de las fibras. Cuando los investigadores modificaron genéticamente *P. aeruginosa* al carecer de cualquiera de estas proteínas, las bacterias produjeron biopelículas que eran menos rígidas y más susceptibles a los antibióticos.
Estos hallazgos sugieren que PslG y Pel son objetivos prometedores para el desarrollo de nuevos antibióticos que puedan alterar la estructura de las biopelículas y matar las bacterias que se encuentran dentro de ellas . Los investigadores ahora están trabajando para diseñar y probar nuevos antibióticos basados en estas proteínas.