1. Crecimiento lento o latencia:
- Algunas bacterias pueden entrar en un estado de crecimiento lento o de latencia en respuesta al estrés por antibióticos. En este estado, tienen una actividad metabólica reducida, lo que los hace menos susceptibles a los antibióticos que se dirigen a las células en crecimiento activo.
2. Bombas de eflujo:
- Las bacterias pueden poseer bombas de eflujo, que son proteínas de membrana que transportan activamente los antibióticos fuera de la célula. Estas bombas pueden reducir las concentraciones de antibióticos intracelulares, permitiendo que las células persistentes sobrevivan.
3. Formación de biopelículas:
- Las biopelículas son comunidades de bacterias que se adhieren a superficies y están encerradas en una matriz protectora de material extracelular. Las biopelículas pueden limitar la penetración de los antibióticos, lo que les dificulta alcanzar y matar las células persistentes.
4. Limitación de nutrientes:
- En entornos con nutrientes limitados, las bacterias pueden presentar tasas de crecimiento reducidas y un metabolismo alterado, lo que puede hacerlas menos susceptibles a los antibióticos.
5. Objetivos de antibióticos alterados:
- Las células persistentes pueden tener objetivos antibióticos alterados, como proteínas ribosómicas modificadas o proteínas fijadoras de penicilina, que reducen la eficacia de los antibióticos.
6. Sistemas Toxina-Antitoxina:
- Algunas bacterias poseen sistemas toxina-antitoxina, donde una toxina es neutralizada por una antitoxina. Bajo estrés antibiótico, la antitoxina puede degradarse, liberándose y provocando la muerte celular. Sin embargo, las células persistentes pueden mantener un equilibrio entre toxina y antitoxina, lo que les permite sobrevivir.
7. Heterogeneidad metabólica:
- Las poblaciones bacterianas pueden exhibir heterogeneidad metabólica, donde las subpoblaciones tienen diferentes perfiles metabólicos. Las células persistentes pueden tener distintas vías metabólicas que les permitan sobrevivir al tratamiento con antibióticos.
Comprender los mecanismos de persistencia es crucial para desarrollar estrategias para combatir las infecciones bacterianas persistentes. Se necesitan enfoques novedosos que se dirijan a las células persistentes o prevengan su formación para mejorar la eficacia de los antibióticos y superar la resistencia a los antibióticos.