1. Soportar peso:Con el paso del agua a la tierra, los vertebrados tuvieron que soportar el peso de su cuerpo contra la gravedad. Las extremidades anteriores evolucionaron para soportar peso y contribuir a la locomoción en tierra. Los huesos de las extremidades anteriores, como el húmero, el radio y el cúbito, se volvieron más robustos y resistentes para soportar el aumento de fuerzas.
2. Locomoción terrestre:las extremidades anteriores desempeñaron un papel crucial en el desarrollo de la forma de andar terrestre, como caminar, correr y trepar. Las articulaciones de las extremidades anteriores, incluidos el hombro, el codo y la muñeca, ganaron mayor movilidad y flexibilidad para facilitar estos movimientos.
3. Manipulación:A medida que los vertebrados llegaron a la tierra, encontraron nuevos desafíos para obtener alimentos, construir refugios e interactuar con su entorno. Las extremidades anteriores se especializaron en diversas tareas de manipulación. Los dedos (de las manos o de los pies) desarrollaron una mayor destreza, lo que permitió agarrar, sostener y manipular objetos. Esta habilidad era crucial para la alimentación, el uso de herramientas y otros comportamientos complejos.
4. Postura y orientación de las extremidades:en ambientes acuáticos, las extremidades anteriores generalmente se colocaban lateralmente para nadar. A medida que los vertebrados se adaptaron a la tierra, sus extremidades anteriores sufrieron cambios de postura y orientación. Se posicionaron ventralmente, más cerca de la línea media del cuerpo. Este cambio facilitó el soporte de peso y la locomoción terrestre.
5. Longitud de las extremidades:La longitud y las proporciones de las extremidades anteriores cambiaron a medida que los vertebrados llegaron a la tierra. En muchos grupos de vertebrados terrestres, las extremidades anteriores se hicieron más cortas en relación con las traseras. Esto permitió una mayor maniobrabilidad y una locomoción eficiente en tierra.
6. Función sensorial:además de sus funciones de locomoción y manipulación, las extremidades anteriores también adquirieron funciones sensoriales. Las extremidades anteriores de muchos vertebrados, particularmente mamíferos y primates, se especializaron en sensaciones táctiles. Esto les permitió explorar su entorno y recopilar información a través del tacto.
En general, la evolución de la función de las extremidades anteriores a medida que los vertebrados se trasladaron a la tierra implicó adaptaciones para el soporte de peso, la locomoción terrestre, la manipulación y las funciones sensoriales. Estos cambios fueron cruciales para el éxito y la diversificación de los vertebrados en ambientes terrestres.