Un nuevo atlas muestra cómo los anticuerpos atacan las variantes de la proteína de pico, proporcionando una hoja de ruta para desarrollar vacunas y tratamientos COVID-19 más eficaces.
El atlas, publicado en la revista Nature, es el análisis más completo hasta la fecha sobre cómo los anticuerpos se dirigen a la proteína de pico, la parte del virus SARS-CoV-2 que se adhiere a las células humanas. Los investigadores estudiaron 28 anticuerpos diferentes, incluidos los de personas que se habían recuperado de la COVID-19, así como los de vacunas y tratamientos experimentales.
El atlas reveló que los anticuerpos se dirigen a la proteína de pico de diversas formas. Algunos anticuerpos se unen al dominio de unión al receptor (RBD), la parte de la proteína de pico que se une al receptor ACE2 en las células humanas. Otros anticuerpos se unen al dominio N-terminal (NTD), una parte de la proteína de pico que se comprende menos.
Los investigadores también descubrieron que algunos anticuerpos se dirigen a la proteína de pico de una manera que es más eficaz que otros para prevenir infecciones. Estos anticuerpos se denominan "anticuerpos neutralizantes" porque pueden impedir que el virus ingrese a las células humanas. Otros anticuerpos son menos eficaces para prevenir infecciones y se denominan "anticuerpos no neutralizantes".
El atlas proporciona un recurso valioso para los investigadores que desarrollan vacunas y tratamientos contra la COVID-19. Al comprender cómo los anticuerpos se dirigen a la proteína de pico, los investigadores pueden diseñar vacunas y tratamientos que tengan más probabilidades de ser eficaces contra el virus.
"Este atlas es un gran paso adelante en nuestra comprensión de cómo los anticuerpos se dirigen a la proteína de pico", afirmó el coautor del estudio, el Dr. David Veesler, profesor de bioquímica de la Universidad de Washington. "Esta información será esencial para desarrollar vacunas y tratamientos contra el COVID-19 más eficaces".
Los investigadores dicen que el atlas es solo el comienzo y que planean continuar estudiando cómo los anticuerpos se dirigen a la proteína de pico para desarrollar vacunas y tratamientos COVID-19 aún más efectivos.
"Tenemos la esperanza de que este atlas nos ayude a poner fin a la pandemia de COVID-19", afirmó el coautor del estudio, el Dr. Jason McLellan, profesor de biología molecular de la Universidad de Texas en Austin. "Estamos comprometidos a continuar nuestra investigación hasta que encontremos una cura para esta devastadora enfermedad".