La investigación sobre psicodélicos ha experimentado un renacimiento en los últimos años, pero a medida que la comunidad científica reconsidera el potencial de la psilocibina para tratar la adicción y los trastornos psiquiátricos, ¿dónde deja eso a la teoría del simio drogado? ? ¿Los psicodélicos estimularon la conciencia humana?
Propuesto por primera vez por el etnobotánico del siglo XX Terence McKenna (1946-2000) en su libro de 1992 "Food of the Gods", el concepto básico es que el consumo de hongos psicodélicos puede haber desempeñado un papel crucial en el desarrollo de la mente y la cultura humanas. /P>
Según el hermano menor del autor, Dennis McKenna, la idea surgió de conversaciones entre los dos. El propio Dennis es etnofarmacólogo y farmacognosista investigador, además de fundador de la Academia McKenna de Filosofía Natural.
"Durante un tiempo tuve la idea de escribir un libro que se habría llamado 'Alucinógenos y evolución', pero nunca lo conseguí", dice Dennis por correo electrónico. "Si bien el enfoque de Terence es diferente de lo que yo habría escrito, existen complementariedades. Las ideas de Terence ciertamente fueron fertilizadas por esas conversaciones".
Ni Terence ni Dennis se refirieron a esta hipótesis con el nombre de "simio drogado", lo que Dennis cree que tergiversa la idea y simplifica el concepto. En esencia, la hipótesis sugiere que debemos el surgimiento del lenguaje, la autorreflexión y otras funciones únicas del cerebro humano a ancestros que comían hongos de psilocibina.
La línea de tiempo exacta para el surgimiento de la conciencia varía, pero Dennis cree que el proceso puede haber comenzado hace 2 millones de años.
"Sabemos que el cerebro triplicó su tamaño hace unos 2 millones de años, y probablemente los ecosistemas que unieron a los homínidos, el ganado y los hongos tenían aproximadamente esa edad", dice Dennis, refiriéndose al estiércol del que emergen los hongos de psilocibina.