Cómo las olas de calor están afectando al fitoplancton del Ártico
Klara Wolf (izquierda) toma muestras de fitoplancton ártico en Kongsfjorden, Ny Ålesund, Svalbard. Crédito:Alfred-Wegener-Institut / Paolo Verzone
La base de la red alimentaria marina en el Ártico, el fitoplancton, responde a las olas de calor de manera muy diferente que a las temperaturas constantemente elevadas. Así lo demuestran los primeros experimentos específicos sobre el tema, que se llevaron a cabo recientemente en la estación AWIPEV del Instituto Alfred Wegener. El comportamiento del fitoplancton depende principalmente de las fases de enfriamiento después o entre las olas de calor, como lo muestra un estudio recién publicado en la revista Science Advances. .
Las olas de calor, que hemos visto cada vez más en todo el mundo en los últimos años, también son cada vez más comunes en el Ártico. Durante una ola de calor, no sólo el aire sino también el océano se calientan:la temperatura es sustancialmente más alta que el valor medio estacional durante al menos cinco días consecutivos. Pero aún no está claro cómo estas fluctuaciones de temperatura a corto plazo afectan a los organismos polares.
Para arrojar luz sobre este aspecto, un equipo dirigido por la Dra. Klara Wolf (Universidades de Hamburgo y Constanza) y el Dr. Björn Rost del Instituto Alfred Wegener, Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina (AWI) ha utilizado experimentos para investigar cómo Las algas unicelulares, el fitoplancton, respondieron a estos eventos extremos. Dado el papel del fitoplancton como base de la red alimentaria marina, los cambios en él podrían resonar en todo el ecosistema ártico.
En experimentos de incubación en la estación AWIPEV en Svalbard, los investigadores permitieron que comunidades naturales de fitoplancton del cercano Kongsfjorden crecieran durante 20 días en diversas condiciones:temperaturas normales y elevadas, pero constantes (2° C, 6° C, 9° C).
A modo de comparación, sometieron el fitoplancton a repetidas olas de calor de diferente intensidad (6° C, 9° C), cada una de las cuales duró cinco días con una fase de enfriamiento de tres días a la temperatura media estacional (2° C) en el medio. Se recolectaron diferentes tipos de muestras a intervalos definidos para caracterizar las respuestas fisiológicas y cualquier posible cambio de especie.