Los objetos negros absorben los rayos de luz. Esto se debe a que los objetos negros absorben todos los rayos de luz, lo que significa que no reflejan ninguna luz. Por el contrario, los objetos blancos reflejan todos los rayos de luz, es decir, no absorben luz. Por eso los objetos negros parecen negros, mientras que los objetos blancos parecen blancos.