Inicio más temprano de la primavera:la primavera a menudo se define por la llegada de temperaturas más cálidas, un mayor crecimiento de las plantas y la floración de las plantas. Las investigaciones han demostrado que, en promedio, estos indicadores de primavera ocurren más temprano en el año en comparación con los registros históricos. Esto significa que la transición del invierno a la primavera se produce antes.
Período prolongado de temperaturas cálidas:los estudios también han encontrado que la duración de las temperaturas cálidas durante la primavera está aumentando. Esta extensión de la estación cálida puede provocar temporadas de crecimiento más largas para las plantas y afectar el comportamiento y los ciclos de vida de varios organismos.
Inicio retrasado de las heladas:Las heladas, que pueden dañar los cultivos y la vegetación, son cada vez menos frecuentes y ocurren más tarde en la primavera en muchas regiones. Este cambio puede tener implicaciones importantes para la agricultura y los ecosistemas.
Cambios en la fenología de las plantas:La fenología de las plantas se refiere al momento de los eventos estacionales de las plantas, como la floración, la brotación y la aparición de hojas. Las investigaciones han observado cambios en la fenología de las plantas, y muchas plantas responden al cambio climático floreciendo y produciendo hojas a principios de año.
Estos hallazgos indican un patrón consistente de alargamiento de la primavera en diferentes regiones del mundo. La llegada más temprana de la primavera, las temperaturas cálidas prolongadas, el retraso de las heladas y la alteración de la fenología de las plantas son indicadores de un clima cambiante y pueden tener impactos de amplio alcance en los ecosistemas, la agricultura y la sociedad en su conjunto.