Uno de los descubrimientos más importantes realizados por JWST es que los agujeros negros pueden pasar de ser creadores a apagar estrellas. En el universo primitivo, se pensaba que los agujeros negros eran responsables de crear nuevas estrellas al absorber gas y polvo y luego expulsarlos en potentes chorros. Sin embargo, las observaciones del JWST han demostrado que los agujeros negros también pueden impedir la formación de estrellas al calentar el gas y el polvo circundantes y calentarlos demasiado para que se produzca la formación de estrellas.
Este descubrimiento tiene implicaciones importantes para nuestra comprensión de cómo evolucionan las galaxias. Los modelos anteriores de formación de galaxias asumían que los agujeros negros siempre desempeñaron un papel positivo en la formación de estrellas. Sin embargo, los nuevos datos del JWST sugieren que los agujeros negros también pueden desempeñar un papel negativo, al impedir la formación de estrellas. Esto podría ayudar a explicar por qué algunas galaxias son más masivas y tienen más estrellas que otras.
JWST también está proporcionando a los científicos una mejor comprensión de cómo interactúan los agujeros negros con las galaxias circundantes. Las observaciones del JWST han demostrado que los agujeros negros pueden generar poderosos vientos que pueden arrastrar el gas y el polvo de las galaxias, impidiéndoles formar nuevas estrellas. Estos vientos también pueden provocar la fusión de galaxias, lo que puede inhibir aún más la formación de estrellas.
JWST continúa brindando a los científicos datos nuevos y apasionantes sobre el universo. Las observaciones del JWST nos están ayudando a comprender mejor el papel de los agujeros negros en la formación y evolución de las galaxias y nos brindan una nueva perspectiva del universo.