Algún día, el tratamiento de pacientes con nanorobots podría convertirse en una práctica estándar para administrar medicamentos específicamente a las partes del cuerpo afectadas por la enfermedad. Pero es posible que la mera inyección de nanopartículas cargadas de drogas no siempre sea suficiente para llevarlas a donde necesitan ir. Ahora los científicos informan en la revista ACS Nano letras el desarrollo de nuevos nano nadadores que puedan moverse fácilmente a través de los fluidos corporales hacia sus objetivos.
Los pequeños robots podrían tener muchos beneficios para los pacientes. Por ejemplo, podrían programarse para eliminar específicamente las células cancerosas, lo que reduciría el riesgo de complicaciones, reducir la necesidad de cirugía invasiva y acelerar la recuperación. Es un campo de estudio floreciente con modelos en etapa temprana actualmente en desarrollo en laboratorios. Pero uno de los desafíos para hacer que estos robots funcionen bien es lograr que se muevan a través de los fluidos corporales, que son como melaza para algo tan pequeño como un nanorobot. Bradley J. Nelson, Salvador Pané, Yizhar Or y sus colegas querían abordar este problema.
Los investigadores ensartaron tres eslabones en una cadena del largo de una fibra de seda. Un segmento era un polímero, y dos eran magnéticos, nanocables metálicos. Pusieron los diminutos dispositivos en un líquido incluso más espeso que la sangre. Y cuando aplicaron un campo magnético oscilante, el nano nadador se movió en forma de S, movimiento ondulatorio a la velocidad de casi una longitud corporal por segundo. El campo magnético también puede dirigir a los nadadores a alcanzar los objetivos.