Los cables están separados por solo 150 átomos. Crédito:Universidad McGill
Un equipo de científicos dirigido por Guillaume Gervais del Departamento de Física de McGill y Mike Lilly de Sandia National Laboratories, ha diseñado uno de los circuitos electrónicos más pequeños del mundo. Está formado por dos cables separados por solo unos 150 átomos o 15 nanómetros (nm).
Este descubrimiento publicado en la revista Nanotecnología de la naturaleza , podría tener un efecto significativo en la velocidad y la potencia de los circuitos integrados cada vez más pequeños del futuro en todo, desde teléfonos inteligentes hasta computadoras de escritorio, televisores y sistemas GPS.
Esta es la primera vez que alguien ha estudiado cómo los cables de un circuito electrónico interactúan entre sí cuando están tan juntos. Asombrosamente, los autores encontraron que el efecto de un cable sobre el otro puede ser positivo o negativo. Esto significa que una corriente en un cable puede producir una corriente en el otro que está en la misma dirección o en la opuesta. Este descubrimiento basado en los principios de la física cuántica, sugiere la necesidad de revisar nuestra comprensión de cómo incluso los circuitos electrónicos más simples se comportan a nanoescala.
Además del efecto sobre la velocidad y la eficiencia de los circuitos electrónicos futuros, este descubrimiento también podría ayudar a resolver uno de los principales desafíos que enfrenta el diseño de computadoras en el futuro. Se trata de gestionar la cantidad cada vez mayor de calor que producen los circuitos integrados. El conocido teórico Markus Büttiker especula que es posible aprovechar la energía perdida en forma de calor en un cable utilizando otros cables cercanos. Es más, Buttiker cree que estos hallazgos tendrán un impacto en el futuro de la investigación tanto fundamental como aplicada en nanoelectrónica.