1. Fraccionamiento nebular:Durante las primeras etapas de formación del sistema solar, la nebulosa solar no era homogénea en su composición. Diferentes regiones exhibieron variaciones en temperatura, presión y composición química. Los elementos volátiles, como el flúor (F) y el cloro (Cl), probablemente se concentraban en las regiones internas más calientes de la nebulosa, más cercanas al joven Sol. Esto resultó en una mayor proporción F/Cl en el material del interior del sistema solar, incluido el disco protoplanetario de la Tierra.
2. Formación del núcleo:A medida que se formó la Tierra, el hierro metálico se hundió hacia el centro para formar el núcleo de la Tierra. Durante este proceso, los elementos siderófilos (elementos que tienen afinidad por el hierro) se dividieron en el núcleo. Si bien ni el F ni el Cl son fuertemente siderófilos, algo de F y Cl podría haberse eliminado del manto de silicato cuando el hierro fundido se segregó en las primeras etapas de la historia de la Tierra.
3. Desgasificación y vulcanismo:El interior de la Tierra libera elementos volátiles mediante erupciones volcánicas y otros procesos de desgasificación. Estos procesos expulsan gases, incluidos F y Cl, del manto terrestre a la superficie y la atmósfera. Con el tiempo, los elementos volátiles se han concentrado en los depósitos de la superficie de la Tierra, como los océanos y la corteza. Este proceso de desgasificación contribuyó al agotamiento de elementos volátiles, incluidos F y Cl, en el interior de la Tierra en comparación con los valores condríticos.
Como resultado de estos procesos, la relación F/Cl de la Tierra es menor que la de las condritas, y se conserva más F en la Tierra en comparación con el Cl.