Pequeños insectos que caminan sobre el agua brindan a los científicos información sobre cómo los microplásticos son empujados bajo el agua
Las gotas de lluvia forman dos cráteres, el segundo de los cuales puede sumergir a los zancudos. Crédito:Actas de la Academia Nacional de Ciencias (2024). DOI:10.1073/pnas.2315667121
Los microplásticos son pequeñas partículas de plástico que pueden causar grandes problemas cuando ingresan al suministro de agua. Una forma en que mi laboratorio de dinámica de fluidos explora el movimiento de los microplásticos es estudiando cómo las gotas de lluvia empujan a los pequeños insectos que caminan sobre el agua bajo el agua.
La exposición a la contaminación microplástica puede plantear riesgos para la salud, como problemas respiratorios y digestivos, un mayor riesgo de diabetes y alteraciones del sueño. Pero los físicos como yo podemos estudiar cómo se mueven en el agua para aprender cómo limpiarla.
Los zancudos son pequeños insectos que pueden caminar sobre el agua. Son abundantes en zonas húmedas y lluviosas, y algunas especies pasan toda su vida sin tocar la tierra. Las gotas de lluvia pueden pesar más de 40 veces el peso de un zancudo y, durante las tormentas, ocasionalmente golpean directamente a los zancudos. Las gotas forman un pequeño cráter bajo la superficie del agua que envuelve al zancudo antes de expulsarlo cuando el cráter colapsa de nuevo a la superficie.
Los zancudos tienen fuertes exoesqueletos que les permiten sobrevivir al impacto de una gota de lluvia. Debido a que estos insectos repelen el agua y son muy livianos, generalmente rebotan inmediatamente. Pero a veces las gotas de lluvia forman un segundo cráter más pequeño justo debajo de la superficie. El segundo cráter suele formarse a partir de una caída grande y rápida.
Si el zancudo se encuentra dentro de este segundo cráter, podría quedar atrapado bajo el agua.