Estos son algunos de los argumentos a favor y en contra de abandonar las revisiones anuales de desempeño:
Argumentos para abandonar las revisiones anuales de desempeño:
- Son lentos y burocráticos. Las revisiones anuales pueden consumir una cantidad significativa de tiempo tanto para los empleados como para los gerentes para prepararse, realizar y realizar un seguimiento. Este tiempo podría dedicarse mejor a otras actividades que contribuyan más directamente a los objetivos de la organización, como el trabajo en proyectos, las interacciones con los clientes o el desarrollo profesional.
- A menudo son ineficaces a la hora de impulsar una mejora significativa del rendimiento. Los estudios han demostrado que las revisiones anuales de desempeño a menudo no son efectivas para motivar a los empleados a mejorar su desempeño. En algunos casos, incluso pueden tener un impacto negativo en la moral y la satisfacción laboral.
- Pueden crear una cultura de miedo y desconfianza. Las revisiones anuales pueden poner a los empleados a la defensiva y hacerles sentir que están siendo juzgados o evaluados constantemente. Esto puede crear una cultura de miedo y desconfianza, que puede sofocar la innovación, la colaboración y la comunicación abierta.
Argumentos en contra de abandonar las revisiones anuales de desempeño:
- Brindan una valiosa oportunidad para recibir comentarios. Las revisiones anuales brindan a los empleados la oportunidad de recibir comentarios de sus gerentes sobre su desempeño. Esta retroalimentación puede ser útil para identificar áreas donde los empleados pueden mejorar, así como para reconocer y recompensar el buen desempeño.
- Ayudan a establecer objetivos y alinear expectativas. Las revisiones anuales brindan a los empleados y gerentes la oportunidad de establecer metas para el próximo año. Esto puede ayudar a alinear las expectativas y garantizar que los empleados trabajen para lograr los mismos objetivos.
- Pueden ayudar a identificar necesidades de formación y desarrollo. Las revisiones anuales pueden ayudar a los gerentes a identificar las necesidades de capacitación y desarrollo de sus empleados. Esta información se puede utilizar para crear planes de desarrollo específicos que ayuden a los empleados a mejorar sus habilidades y competencias.
En última instancia, la decisión de deshacerse o no de las revisiones anuales de desempeño es compleja y depende de las necesidades específicas de la organización. Sin embargo, al sopesar los argumentos a favor y en contra de abandonar las revisiones anuales, las organizaciones pueden tomar una decisión informada sobre el mejor enfoque para sus empleados.
Además de los argumentos enumerados anteriormente, hay algunos otros factores a considerar al tomar la decisión de deshacerse o no de las revisiones anuales de desempeño. Estos incluyen:
- La cultura y los valores de la organización.
- El tamaño de la organización.
- La industria en la que opera la organización.
- El nivel de rotación de empleados.
- La disponibilidad de otras herramientas y procesos de gestión del desempeño.
Al considerar cuidadosamente todos estos factores, las organizaciones pueden tomar la mejor decisión para su situación particular.