En su libro "Narrative Economics", Shiller sostiene que las historias desempeñan un papel poderoso en la configuración de los resultados económicos. Afirma que es más probable que las personas tomen decisiones basadas en historias en las que creen, incluso si esas historias no son necesariamente precisas.
Shiller da el ejemplo de la burbuja de las puntocom de finales de los años noventa. Sostiene que la burbuja fue alimentada por una historia sobre el potencial de Internet. Esta historia fue tan poderosa que llevó a los inversores a pasar por alto el hecho de que muchas de las empresas puntocom no eran realmente rentables.
Shiller también analiza el papel que desempeñan las historias en las crisis financieras. Sostiene que las crisis financieras a menudo son causadas por historias que llevan a la gente a creer que hay menos riesgo en el mercado del que realmente existe. Por ejemplo, la crisis de las hipotecas de alto riesgo fue impulsada por una historia sobre la seguridad de las hipotecas de alto riesgo. Esta historia fue tan poderosa que llevó a los inversores a pasar por alto el hecho de que muchas hipotecas de alto riesgo no eran realmente seguras.
Shiller concluye que las historias son una fuerza poderosa en la economía. Sostiene que debemos ser conscientes del papel que desempeñan las historias en nuestras decisiones y que debemos ser críticos con las historias que nos cuentan.
En relación con la cuestión de cómo las empresas se aprovechan de sus debilidades, el trabajo de Shiller sugiere que las empresas pueden utilizar historias para explotar los prejuicios y las debilidades de las personas. Por ejemplo, una empresa puede utilizar una historia sobre el potencial de un nuevo producto para convencerle de que lo compre, incluso si realmente no lo necesita.
Es importante ser conscientes del papel que juegan las historias en nuestras vidas y ser críticos con las historias que nos cuentan. No debemos dejar que las historias nos lleven a tomar decisiones de las que luego nos arrepintamos.