El estudio en cuestión fue publicado en la revista Nature Genetics. Analizó el ADN de los restos de 101 personas que vivieron en Europa hace entre 5.700 y 5.200 años. Los investigadores descubrieron que una variante genética asociada con la resistencia a la peste estaba presente en el 38% de los individuos. Concluyeron que esto sugiere que la peste estaba presente en Europa en ese momento y puede haber sido responsable del declive de las comunidades agrícolas del Neolítico.
Sin embargo, hay varios problemas con esta interpretación. Primero, la variante genética que identificaron los investigadores no es específica de la peste. También puede conferir resistencia a otras enfermedades, como la tularemia y la yersiniosis. Por lo tanto, es posible que la variante genética estuviera presente en la población neolítica debido a la exposición a estas otras enfermedades, no a la peste.
En segundo lugar, no hay evidencia arqueológica que respalde la afirmación de que la peste estuvo presente en Europa durante el período Neolítico. No ha habido informes de focos de peste ni otras evidencias de mortalidad masiva que se esperaría si hubiera ocurrido una pandemia de peste.
Por lo tanto, la afirmación de que la plaga diezmó a los agricultores neolíticos hace 5.200 años no está respaldada por evidencia. Se necesitan más investigaciones para determinar la causa del declive de las comunidades agrícolas del Neolítico.