Utilizando datos de seguimiento de alta resolución de gorriones salvajes, los investigadores descubrieron que las aves que estaban fuertemente unidas a sus vecinos tenían más probabilidades de volar juntas, compartir alimentos y defenderse entre sí de los depredadores. Estas relaciones sociales también influyeron en la estructura y dinámica general de la bandada, haciéndola más cohesiva y eficiente para encontrar comida y evitar peligros.
"Nuestro estudio proporciona nuevos conocimientos sobre la importancia de las relaciones sociales en los grupos de animales", dijo la autora principal, la Dra. Simone Morand-Ferron. "Demostramos que estas relaciones no sólo son importantes para las aves individuales, sino también para la bandada en su conjunto".
Los investigadores creen que los hallazgos de este estudio podrían tener implicaciones para comprender el comportamiento de otros animales sociales, incluidos los humanos.
"Las relaciones sociales son una parte fundamental de la vida humana", dijo el autor principal, el profesor Iain Couzin. "Nuestro estudio sugiere que estas relaciones pueden tener un impacto similar en el comportamiento humano que en las bandadas de aves".
El estudio se realizó en colaboración con investigadores de la Universidad de Oxford y el Instituto Max Planck de Ornitología.
Hallazgos clave:
* Las aves individuales dentro de una bandada forman fuertes vínculos sociales con vecinos específicos.
* Estas relaciones sociales influyen en el comportamiento general del rebaño, haciéndolo más cohesivo y eficiente a la hora de encontrar alimento y evitar peligros.
* Los hallazgos de este estudio podrían tener implicaciones para comprender el comportamiento de otros animales sociales, incluidos los humanos.