Primer estudio: Los investigadores realizaron un experimento de campo en un bosque de Suiza. Plantaron 30 especies de plantas diferentes en parcelas de tierra y luego rastrearon la rapidez con la que se descomponían las hojas de estas plantas en el transcurso de un año. Los investigadores descubrieron que la tasa de descomposición aumentaba con el número de especies de plantas en la parcela. Esto sugiere que comunidades de plantas más diversas pueden ayudar a acelerar el proceso de reciclaje de nutrientes en el ecosistema.
Segundo estudio: Los investigadores crearon una serie de experimentos de laboratorio para estudiar cómo la diversidad de microorganismos del suelo afecta la descomposición de las hojas. Descubrieron que la presencia de una mayor diversidad de microorganismos aumentaba la tasa de descomposición. Esto sugiere que la pérdida de biodiversidad del suelo podría ralentizar la tasa de reciclaje de nutrientes en los ecosistemas, impactando negativamente en el funcionamiento de los ecosistemas.
Estos dos estudios proporcionan nuevos conocimientos sobre el papel de la biodiversidad en la descomposición de las plantas. Los hallazgos sugieren que comunidades de plantas más diversas y comunidades microbianas del suelo más diversas pueden ayudar a acelerar el proceso de reciclaje de nutrientes, que es esencial para el funcionamiento de los ecosistemas.