Reduzca el uso de pesticidas y herbicidas. Los pesticidas y herbicidas pueden matar insectos y animales beneficiosos, por lo que es mejor evitar su uso siempre que sea posible. Si necesita usar un pesticida o herbicida, asegúrese de seguir cuidadosamente las instrucciones de la etiqueta y use solo la cantidad necesaria.
Haga abono con los desechos de su jardín. El compostaje es una excelente manera de reciclar los desechos del jardín y convertirlos en un fertilizante natural. El compostaje también ayuda a mejorar la salud del suelo y reducir la necesidad de fertilizantes químicos.
Riegue su césped profundamente y con poca frecuencia. Regar el césped en profundidad y con poca frecuencia fomenta el crecimiento profundo de las raíces, lo que hace que el césped sea más tolerante a la sequía. También ayuda a prevenir el crecimiento de malas hierbas.
Corte el césped a una temperatura alta. Cortar el césped a una temperatura alta (de 3 a 4 pulgadas) ayuda a reducir la tensión en el césped y fomenta el crecimiento profundo de las raíces. También ayuda a prevenir la propagación de malas hierbas.
Deje las hojas en el césped en otoño. Dejar las hojas en el césped en otoño proporciona alimento y refugio a la vida silvestre, y también ayuda a aislar el suelo y proteger el césped de los daños del invierno.
Si sigue estos consejos, podrá crear un césped hermoso y respetuoso con la vida silvestre.