En la Declaración de Independencia, la frase "todos los hombres son creados iguales" afirma que todo ser humano nace con iguales derechos y prerrogativas fundamentales, independientemente de cualquier diferencia de origen étnico, color, credo, nacionalidad, posición social, riqueza o cualquier otra otra forma de distinción. Enfatiza la igualdad humana universal.