La respuesta a esta pregunta no es del todo sencilla. Si bien es indudable que el cambio climático está afectando los patrones climáticos, es difícil decir de manera definitiva si algún evento climático extremo es resultado directo del cambio climático. Sin embargo, hay evidencia que sugiere que el cambio climático está haciendo que los eventos de frío extremo sean más probables.
Por ejemplo, un estudio publicado en la revista Nature Geoscience en 2020 encontró que la frecuencia y la intensidad de las olas de frío en el hemisferio norte han aumentado desde la década de 1970. El estudio encontró que este aumento probablemente se deba a una combinación de factores, incluido el aumento de las concentraciones de gases de efecto invernadero y los cambios en la circulación atmosférica.
Otro estudio, publicado en la revista Geophysical Research Letters en 2019, encontró que el cambio climático causado por el hombre está aumentando el riesgo de eventos de frío extremo en los Estados Unidos. El estudio encontró que el riesgo de una ola de frío de la misma magnitud que la que azotó el Medio Oeste en 2014 es ahora tres veces mayor de lo que habría sido en un mundo sin cambio climático.
Si bien estos estudios no prueban que el cambio climático sea la única causa del frío extremo que actualmente afecta a los Estados Unidos, sí proporcionan evidencia que sugiere que el cambio climático está haciendo que tales eventos sean más probables.
Además de la evidencia científica, también hay observaciones anecdóticas que sugieren que el cambio climático está afectando la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos. Por ejemplo, muchas personas han notado que los inviernos parecen volverse más suaves en los últimos años, mientras que los veranos parecen volverse más calurosos. Esto es consistente con lo que esperaríamos ver como resultado del cambio climático.
Por supuesto, es importante recordar que el tiempo y el clima no son lo mismo. El tiempo se refiere al estado de la atmósfera a corto plazo, mientras que el clima se refiere al promedio de las condiciones climáticas a largo plazo. Por lo tanto, es posible que experimentemos fenómenos meteorológicos extremos incluso en un clima más cálido.
Sin embargo, la evidencia sugiere que el cambio climático está aumentando la probabilidad y la gravedad de fenómenos meteorológicos extremos. Esta es una preocupación grave, ya que los fenómenos meteorológicos extremos pueden tener un impacto devastador en la vida humana y las propiedades. Por lo tanto, es importante tomar medidas para mitigar los efectos del cambio climático y reducir nuestro riesgo de experimentar estos eventos en el futuro.