Si bien el cambio climático puede haber sido un factor contribuyente, no fue la única causa del colapso de la civilización maya. Numerosos factores complejos e interconectados, incluida la sequía prolongada, la inestabilidad política, la guerra, la superpoblación, la deforestación y la mala gestión de los recursos, desempeñaron un papel importante en el declive de la sociedad maya.