A pesar de su exuberante vegetación y abundancia de vida, una jungla puede ser un ambiente hostil e inhóspito. Los monos se han adaptado para prosperar en las junglas, desarrollando características físicas, conjuntos de habilidades y patrones de comportamiento diseñados específicamente para ayudarlos a sobrevivir en estos hábitats peligrosos. Los monos de la selva han desarrollado estructuras y sistemas que les permiten conservar energía, ubicar alimentos y ubicarse en el dosel de la selva.
Extremidades
Los monos de la jungla han desarrollado extremidades largas y desgarbadas que les permiten balancearse rápidamente de árbol en árbol. Debido al alcance y la fuerza de sus brazos y piernas, algunas especies de monos de la selva, como el mono araña y el gibón, no tienen que descender al suelo del bosque para viajar. Esto les ayuda a conservar energía, porque su comida está en el dosel; bajar al suelo para mudarse a una nueva zona de alimentación sería una pérdida de fuerza.
Manos, pies y colas
Con largas y anchas manos y pies flexibles, monos de la selva como los orangutanes y los gibones pueden agarrar ramas fácilmente y sostenerlas lo suficiente como para soportar su propio peso mientras se balancean de árbol en árbol. Los monos araña negros han evolucionado sin pulgares, porque los pulgares eran un inconveniente en lugar de una ayuda para agarrar ramas. También tienen colas prensiles, capaces de sostener ramas como una mano extra. Los monos araña usan sus colas para agarrarse a los árboles mientras buscan comida con ambas manos.
Voices
Las junglas son densas y ofrecen líneas de visión limitadas, por lo que los monos de la selva se han adaptado para ubicar cada una otro por sonido. Los monos aulladores gritan lo suficientemente fuerte como para oírse a unos 5 kilómetros de distancia, y los chimpancés usan sus pies y manos grandes y planos para tamborilear en los árboles, identificando su paradero a otros chimpancés. Los monos araña también tienen voces fuertes que se llevan particularmente bien a través de los doseles de la selva, donde viven. Usan diferentes llamadas, gritos y ladridos para saludarse, localizarse y asustar a los depredadores.
Comportamiento
Los monos de la jungla se han adaptado a su entorno tanto desde el punto de vista del comportamiento como fisiológicamente. Las madres orangutanas enseñan a sus crías a ser solitarias, alejándolas de otros orangutanes y dejándolos solos para aclimatarse, porque si viajasen en grupos no encontrarían suficiente comida para apoyar a todos los individuos. Los monos araña negros viajan en grupos grandes cuando la comida es abundante y se dividen en pequeños grupos cuando escasean los alimentos. Los chimpancés se dispersan a través del dosel, cada individuo busca un árbol con suficiente fruta para todo el grupo. Cuando un mono encuentra tal árbol, convoca al resto de su comunidad gritando fuerte.