El dióxido de carbono se produce naturalmente en la atmósfera. Es un ingrediente esencial en la fotosíntesis, el proceso por el cual las plantas producen alimentos y energía. Los niveles de dióxido de carbono atmosférico han aumentado desde la Revolución Industrial. Las causas principales son la deforestación y la quema de combustibles fósiles como el carbón. A medida que los niveles de dióxido de carbono han aumentado, también lo hacen sus efectos en la contaminación del aire. El dióxido de carbono representa menos del 1 por ciento de los gases atmosféricos. Sin embargo, existe un delicado equilibrio entre el dióxido de carbono y otros gases. La preocupación por el dióxido de carbono es el cambio significativo en un período de tiempo relativamente corto.
Efecto invernadero
El dióxido de carbono contribuye a la contaminación del aire en su función en el efecto invernadero. El dióxido de carbono atrapa la radiación a nivel del suelo, creando ozono a nivel del suelo. Esta capa atmosférica evita que la tierra se enfríe durante la noche. Un resultado es un calentamiento de las aguas oceánicas. Los océanos absorben dióxido de carbono de la atmósfera. Sin embargo, las temperaturas más altas del agua comprometen la capacidad de los océanos para absorber dióxido de carbono. Con el tiempo, los efectos del dióxido de carbono se agravan.
Cambio climático
Otro efecto ambiental del dióxido de carbono sobre la contaminación atmosférica es el cambio climático. La temperatura de la superficie de la tierra ha aumentado en los últimos 100 años, según estudios realizados por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA). Los científicos creen que la contaminación del dióxido de carbono es el principal culpable. Los efectos son altamente complejos. La evidencia muestra, sin embargo, que los niveles de agua oceánica han aumentado, lo que ha provocado la pérdida de la costa y los humedales costeros.
Lluvia ácida
El dióxido de carbono contribuye al efecto ambiental conocido como lluvia ácida. Las emisiones liberadas de las plantas de energía que queman combustibles fósiles se combinan con la humedad en el aire. El resultado es precipitación con un alto contenido de ácido. La evidencia documentada muestra el daño físico a los árboles y otras plantas. La contaminación del agua y del suelo se produce por la precipitación ácida. Un factor que complica la movilidad de las emisiones. Los efectos del dióxido de carbono pueden verse y sentirse lejos de sus fuentes, haciendo que sus impactos en la contaminación del aire sean más graves.
Impactos en la salud humana
Las emisiones de dióxido de carbono impactan la salud humana al desplazar el oxígeno en el atmósfera. La respiración se vuelve más difícil a medida que aumentan los niveles de dióxido de carbono. En áreas cerradas, los altos niveles de dióxido de carbono pueden provocar problemas de salud, como dolores de cabeza. Los niveles de dióxido de carbono pueden indicar niveles elevados de otros contaminantes atmosféricos dañinos, como compuestos orgánicos volátiles que contribuyen a la contaminación del aire en interiores.