A primera vista, sus cuerpos grandes y sus cortas aletas parecen hacer de los focas blancos fáciles para los depredadores y otros que competirían por la comida y el territorio. Sin embargo, estos mamíferos marinos están lejos de estar indefensos. Si es posible, un sello normalmente usará el vuelo como defensa en lugar de luchar.
Anatomía y Fisiología
Parte de la defensa del sello radica en la dificultad de dañar un sello. Con varios centímetros de grasa, se necesita un animal mucho más grande para morder un sello y comerlo. A excepción de animales como orcas y tiburones grandes, la mayoría de los depredadores no se molestan en intentar capturar un sello.
Dónde viven
La capacidad de vivir en el agua y en la tierra también es parte de su defensa. Cuando se encuentra en el agua, el cuerpo aerodinámico del sello le permite maniobrar a los depredadores y saltar rápidamente a la tierra para escapar por completo del depredador acuático.
Agresión
Como último recurso cuando se lo agarra por un depredador, las focas morderán y lucharán para defenderse. En el caso de las focas machos, como los elefantes marinos que protegen un territorio de los machos que compiten entre sí, los dos lucharán mordiéndose y golpeándose el cuello entre sí.