1. Compactación:
* baja presión: Los granos en la arenisca son empujados más cerca, reduciendo el espacio de los poros y aumentando la densidad de la roca. Este es el efecto más común de la presión sobre la arenisca.
* Alta presión: Con muy alta presión, los granos pueden deformarse y volverse más entrelazados, reduciendo aún más la porosidad.
2. Recristalización:
* La presión y el calor pueden hacer que los granos minerales en la arenisca se recristalizaran, formando cristales más grandes. Esto puede hacer que la arenisca sea más resistente a la meteorización y la erosión.
3. Cementation:
* Si hay fluidos que contienen minerales disueltos, la presión puede hacer que estos minerales precipiten y llenen los espacios entre los granos. Este proceso, llamado cementación, fortalece aún más la arenisca. Los minerales de cementación comunes incluyen cuarzo, calcita y óxidos de hierro.
4. Deformación:
* A presiones muy altas, la arenisca puede comenzar a deformarse plásticamente. Esto puede conducir a plegar, fallas o incluso a la formación de rocas metamórficas.
5. Metamorfismo:
* Si la presión y la temperatura se vuelven lo suficientemente altas, la arenisca sufrirá metamorfismo, transformándose en un tipo diferente de roca. Por ejemplo, la arenisca se puede metamorfose en cuarcita, una roca muy densa y densa.
Ejemplos:
* Arenisca bajo presión en una cuenca sedimentaria: El peso de los sedimentos suprayacentes causa compactación y cementación, formando una arenisca más sólida y resistente.
* arenisca en una cordillera: La intensa presión de las fuerzas tectónicas puede causar plegamiento, fallas e incluso metamorfismo, lo que resulta en diferentes tipos de rocas.
En resumen, el efecto de la presión sobre la arenisca depende de la intensidad y la duración de la presión, así como de la presencia de otros factores como la temperatura y los fluidos. El resultado puede variar desde una simple compactación hasta cambios significativos en la composición, estructura e incluso su clasificación de la roca.