Continentes:
* Pangea: El Pangea supercontinente se estaba formando, reuniendo la mayoría de las masas de tierra de la Tierra. Esta masiva masiva de tierra se extendía de poste a polo, con vastas áreas interiores que experimentaban temperaturas extremas.
* Grandes pantanos y humedales: El interior de Pangea estaba en gran medida cubierto de extensos pantanos y humedales. Esto se debió al clima cálido y húmedo y a la abundancia de agua de la fusión de los continentes.
* bosques extensos: Estos pantanos y humedales estaban dominados por vastos bosques de helechos gigantes, colas de caballo y licópodos. Estas plantas prosperaron en el entorno cálido y húmedo y crearon las condiciones que eventualmente condujeron a la formación de grandes depósitos de carbón.
* Montañas: Algunas cadenas montañosas estaban presentes, formadas por la colisión de continentes que crearon Pangea. Estas montañas probablemente influyeron en los patrones climáticos y crearon diversos microclimas.
Clima:
* cálido y húmedo: El clima carbonífero era generalmente cálido y húmedo, con temperaturas con un promedio de alrededor de 20 ° C (68 ° F).
* Variaciones estacionales: Aunque el clima general era cálido, probablemente hubo una variación estacional, con períodos más fríos en latitudes más altas.
* niveles altos de oxígeno: La atmósfera durante el período carbonífero tuvo niveles de oxígeno mucho más altos que hoy, posiblemente superando el 35%. Esto contribuyó al gigantismo visto en algunos insectos y anfibios.
vida:
* Insectos gigantes: Los altos niveles de oxígeno respaldaron la evolución de los insectos gigantes, incluidas las libélulas con envergaduras de más de 70 cm (28 pulgadas).
* Anfibios: Los anfibios eran diversos y abundantes, incluidos los primeros tetrápodos y grandes anfibios como los famosos *eryops *.
* Reptiles tempranos: Los primeros reptiles, como el *Hylonomus *, comenzaron a aparecer y se adaptaron a las condiciones más secas de las áreas más interiores.
* Flora diversa: Como se mencionó anteriormente, los pantanos y humedales repletos de una flora diversa, incluidos grandes helechos, caballos y licópodos en forma de árboles.
En resumen, la tierra carbonífera era un mundo de pantanos gigantes, vastos bosques y un clima húmedo y cálido. Este entorno apoyó una notable diversidad de la vida, incluidos los insectos gigantes, los grandes anfibios y los primeros reptiles.