1. entisols: Estos son suelos jóvenes y mal desarrollados, a menudo que se encuentran en áreas con actividad geológica reciente (por ejemplo, llanuras de inundación, áreas volcánicas). Carecen de horizontes distintos y se caracterizan por una meteorización mínima.
2. Inceptisols: Estos suelos están algo más desarrollados que los entisoles, que muestran signos tempranos de formación de horizonte. Por lo general, se encuentran en áreas con lluvia moderada y climas templados.
3. Alfisols: Estos son suelos altamente fértiles con horizontes bien desarrollados. Son comunes en regiones húmedas y templadas y, a menudo, apoyan la agricultura productiva.
4. Mollisols: Estos son los "suelos de la pradera", conocidos por su oscuro y rico contenido de materia orgánica. Se encuentran en pastizales y son altamente productivos para la agricultura.
Es importante tener en cuenta que estas son solo cuatro categorías amplias, y hay muchas otras categorías regionales de suelos basados en factores como el clima, el material padre y la vegetación.