* corteza: La corteza se compone principalmente de elementos más ligeros como silicio, oxígeno, aluminio y hierro. Esto lo convierte en la capa menos densa, con una densidad promedio de 2.7 g/cm³ (corteza continental) y 3.0 g/cm³ (corteza oceánica).
* manto: El manto está compuesto por materiales más densos como hierro, magnesio y calcio. Su densidad varía de 3.3 g/cm³ Cerca de la corteza a 5.5 g/cm³ más profundo hacia abajo.
* núcleo exterior: El núcleo externo se compone principalmente de hierro líquido y níquel. Tiene una densidad de 9.9 g/cm³ .
* núcleo interno: El núcleo interno es sólido, compuesto principalmente de hierro y níquel. Es la capa más densa, con una densidad de 12.8 g/cm³ .
Aquí hay una analogía simple: Imagine un tazón de agua con diferentes objetos flotando en él. Los objetos más ligeros (como un corcho) representarían la corteza, mientras que los objetos más pesados (como guijarros o rocas) representarían el manto, el núcleo externo y el núcleo interno.
La menor densidad de la corteza le permite "flotar" en la parte superior del manto más denso. Esto es similar a cómo un bloque de madera flota en el agua. La diferencia en la densidad entre la corteza y el manto es una razón clave para la tectónica de placas, ya que las placas de la corteza menos densa se mueven sobre el manto fluido.