1. Composición:
* Volcanes explosivos: Estos volcanes tienden a estallar con mucha fuerza, debido a una gran cantidad de gases disueltos (principalmente vapor de agua) atrapados dentro del magma. Producen rocas ricas en sílice, como riolita y dacita, que son muy viscosas. Esta alta viscosidad atrapa los gases, acumulando presión hasta una erupción violenta.
* Volcanes no explosivos: Estos volcanes estallan con menos fuerza, ya que su magma tiene un contenido de gas más bajo y es menos viscoso. Producen rocas como basalto y andesita, que son más bajas en sílice. La menor viscosidad permite que los gases escapen más fácilmente, evitando una acumulación de presión.
2. Textura:
* Volcanes explosivos: Las erupciones violentas crean rocas con una textura de grano fino llamado rocas piroclásticas . Esto se debe a que el magma se separa en pequeños fragmentos que se enfrían rápidamente. Estas rocas pueden incluir cenizas, piedra pómez y bombas volcánicas.
* Volcanes no explosivos: Las erupciones menos violentas producen rocas con una textura más gruesa, a menudo con cristales más grandes, como los flujos de basalto .
3. Otras pistas:
* Presencia de bombas volcánicas: Grandes trozos de lava grandes y solidificados expulsados durante una erupción son un fuerte indicador de un evento explosivo.
* Espesor de capas de cenizas: Las gruesas capas de cenizas volcánicas indican una erupción altamente explosiva.
* Presencia de brecha volcánica: Este tipo de roca se forma a partir de fragmentos de otras rocas que se han cementado, a menudo asociados con erupciones explosivas.
En resumen: Al estudiar la composición, la textura y otras características de las rocas volcánicas, los científicos pueden descifrar la naturaleza de las erupciones pasadas y predecir el potencial de futuros eventos explosivos o no explosivos.