1. Rocas metamórficas foliadas: Estas rocas tienen una apariencia en capas o bandas debido a la alineación de los granos minerales bajo presión. Los ejemplos incluyen Slate, Schist y Gneiss.
2. Rocas metamórficas no foliadas: Estas rocas carecen de una apariencia en capas porque sus minerales están orientados al azar. Los ejemplos incluyen mármol, cuarcita y hornfels.
3. Rocas metamórficas de contacto: Estas rocas se forman cuando las rocas existentes se alteran por el calor y la presión de una intrusión ígnea. Pueden ser foliados o no foliados, dependiendo de las condiciones específicas de su formación.
Entonces, si bien es común hablar sobre rocas metamórficas foliadas y no foliadas, recuerde que las rocas metamórficas de contacto son una categoría distinta dentro de la clasificación más amplia.